Huye del frío en Navidad
Si te has quedado con ganas de más playa, una perfecta opción es huir del frío y refugiarte en playas paradisíacas, donde relajarse y tomar unos mojitos escuchando de fondo el mar. Algunos de los vuelos que puedes tomar desde el aeropuerto de Alicante y disfrutar de esas vacaciones con bikini en pleno diciembre.
Isla de Pascua
La Isla de Pascua está ubicada en la Polinesia, en medio del océano Pacífico, muy conocida por la película “Rapa Nui” de 1994 donde se muestra parte de la cultura nativa y sus impresionantes paisajes. Una Isla conocida por el enigma que esconden sus gigantescas cabezas, protegidas por el gobierno dentro del Parque nacional Rapa Nui. Un sitio paradisíaco donde disfrutar de unas vacaciones absorbiendo experiencias únicas.
El vuelo a Isla de Pascua desde Alicante hace 3 escales y es de unas 33 horas, con un precio medio de ida y vuelta por persona de 3.000 euros. Un viaje solo al alcance de unos pocos, pero que promete paisajes de ensueño.
Hoy en día la Isla de Pascua es una zona muy turística por lo que cuenta con diversas actividades para conocer su cultura, sus ancestrales raíces, sus gentes y sus parajes. Además, de hoteles y paradores donde alojarse y disfrutar de su exótica gastronomía.
Importante cuando en España tenemos el invierno, en la Isla de Pascua es verano, un cálido subtropical verano que se extiende desde el 21 de diciembre al 21 de marzo, con máximas de 28 ºC y mínimas de 15ºC.
Ciudad del Cabo
Ciudad del Cabo es, después de Johannesburgo, la segunda ciudad más poblada de Sudáfrica. Pero eso no quita de ser un destino idílico para disfrutar de playas y cultura. Una ciudad que entremezcla a la perfección las raíces africanas con la cosmopolita diversidad occidental.
Aunque nunca te lo hubieras planteado, en esta hermosa ciudad encontrarás una diversidad de fauna y flora impresionante. Cabe destacar especies como tiburones blancos, ballenas, pingüinos y focas. Perfecto si quieres traer contigo un buen reportaje fotográfico
Visitar Ciudad del Cabo implica hacer dos escalas hasta llegar a nuestro destino y una media de 22 horas de vuelo. El precio para ida y vuelta está entorno a los 1000 euros, pero como siempre te recomendamos no dejarlo para último momento ya que los precios aumentan.
Aquí sucede igual que en la Isla de Pascua, mientras aquí sacamos los abrigos allí los guardan. Por tanto, encontrarás un verano que va de noviembre a febrero, suave y seco. Aunque se mantiene muy estable todo el año la temperatura, encontrarás en estas fechas hasta 35 ºC
Navidades en las montañas
Otra forma de disfrutar de las Navidades es buscando lugares lejanos, rodeados de nieve y paisajes casi de cuentos de hadas. Estos son dos ejemplos de ciudades que puedes visitar si viajas desde el aeropuerto de Alicante
Reikiavik
Reikiavik es la capital y ciudad más poblada de Islandia. Un lugar conocido por sus abundantes géiseres, que en medio de la gélida nieve, emiten como fuentes columnas de agua y vapor caliente. Pero no sólo en estas espectaculares masas de aire caliente reside la belleza de la ciudad, sino que se encuentra muy cerca del Círculo Polar Ártico, uno de los paralelos terrestres más importantes.
Reikiavik se ha puesto de moda con las últimas temporadas de Juego de Tronos, tal vez por ser una ciudad donde el calor de los géiseres y el frío de la nieve se entremezclan tal como ocurre en la serie. Pero, no sólo queda aquí, también fue inspiración de Julio Verne, que marcó la ciudad como la posible entrada al centro de la Tierra.
A diferencia de otras zonas turísticas, tal vez sea por su clima helado, no se encuentra masivamente poblado de turista, así que pasear por sus calles, disfrutar de sus paisajes y de su gastronomía es un placer alejado de los bullicios que acompañan a muchos turistas.
Si decides empaquetar chaquetas y mucho abrigo para estas Navidades y visitar esta hermosa ciudad, no te pierdas las auroras boreales que en pocos sitios del mundo pueden apreciarse como aquí.
El vuelo hasta Reikiavik desde el aeropuerto de Alicante es mucho más económica a comparación de los ejemplos anteriores y al alcance de cualquiera. Por unos 300 euros puedes ir y venir a la ciudad en una media de 4 horas. Perfecto para un rápido fin de semana.
Recuerda que aquí el frío predomina, mucho más en invierno, donde la temperatura promedio en verano de 12 °C, mientras que en enero es de -6 °C
Tromsø
Tromsø se encuentra en la provincia de Troms, ubicada en Noruega. Otra opción para disfrutar de la nieve, el frío y el hielo en invierno, una complejo continental que se suma a numerosas islas, incluso algunas de ellas deshabitadas.
A pesar de ser Odin unos de los dioses por excelencia de la lejana Noruega, esta zona es famosa porque adquirió importancia en la Edad Media al ser un núcleo religioso de la Iglesia católica, donde hoy se encuentra la sede episcopal de la Iglesia de Noruega.
Dentro de sus atractivos, podemos destacar la isla de Kvaløya, que se encuentra a una media en coche del centro y es un perfecto punto de partida hacía cuentos de ensueño. Aunque en invierno hay que tener mucho más cuidado ya que esta zona se encuentra nevada.
Pero si estos lugares tienen algo mágico es la posibilidad de ser de las pocas zonas donde ver el sol de medianoche, aunque para ello prepara en mayo tu viaje. O bien cazar auroras boreales, para ello lo mejor es contratar excursiones que persiguen este hecho, así seguro que traerás fotografías y emociones únicas.
El vuelo de ida y vuelta tiene un precio que ronda los 400 euros y tiene una duración de unas 2 horas y medias.
Además, en invierno es una ciudad fría que ronda los 6º C y tiene fama de ser la ciudad de Noruega con más nieve. Así que si vas en invierno, debes ir bien preparado.
Viajar se ha convertido en uno de los grandes placeres de la vida, es ese momento en el que queremos que todo salga bien y que al volver a casa todo esté como lo dejemos, así que nada mejor que antes de embarcarte en tu aventura, llegues al aeropuerto de Alicante con la tranquilidad de saber que tu coche estará a buen recaudo en el parking We Park, que te trasladará y recogerá en el aeropuerto sin tener que preocuparte por ello.
